metro

after dos meses de vacaciones había olvidado cuán desastroso es andar en metro, ainda más en estaciones clave. como una de las que más uso ( estación central ), donde la mitad de la gente anda con bolsos grandes bolsos, que me quitan paciencia. pero me rio, no sé desde cuándo me volví tan pasiva con los asuntos que me enojan. estaré perdiendo la cabeza, tal vez.
o ya me rendí del enojo que no sirve de nada. no sirve.
no sé si ya comenté esto antes, pero en la estación plaza de armas es asqueroso bajar. pero no entiendo qué pasa. por qué es en esa estación en particular que la gente no deja bajar antes de subir. o sea, sé que eso ocurre en varias otras estaciones pero no siempre siempre en la misma. pero en plaza de armas sí que es el colmo, realmente increíble. se paran frente a la puerta y ven que habemos personas dentro que ansiamos (ansiamos) descender, y no se hacen a un lado. incivilizados. pero ya pasé la etapa de criticar rabiosamente la cultura chilensis, ahora sólo queda resignación, como en varios otros aspectos de mi vida, ahora me doy cuenta.

hace rato que ando escribiendo mal, así que lo siento.

y sigan andando en metro, es más cómodo y tal vez nos encontramos por ahí, soy la chica con audífonos y un libro. siempre.